LA AUTOAYUDA AL SERVICIO DE LA SALUD
¡No vivimos para comer, comemos para vivir!
La mitad de los habitantes del
planeta Tierra, llamados “el tercer y cuarto mundo”, mueren por falta de
alimentos y la otra mitad, llamados “el primer y segundo” mundo, mueren por
comer en exceso. ¡El mundo está muy mal repartido!
Comer es una “celebración” con
la Naturaleza, con la Fuente de la vida
y los alimentos. Es la Alegría de compartir “la mesa” en buena compañía.
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| Alimentarse de forma correcta y natural es ofrecerte el placer de vivir en salud |
Lo que se pretende es que la
gente descubra el placer de comer y que recupere el saber intuitivo de “qué,
cuándo y cuánto” deben comer para mantener la salud.
La mayoría de las personas
comen demasiado deprisa y en exceso, a veces, para “matar” el estrés o la
ansiedad. Sin embargo, es preciso comer despacio, masticar bien los alimentos y saber que la digestión comienza en la boca.
Para mejorar este estado,
motivado por la alteración del sistema nervioso, es muy recomendable llevar a cabo un “Ayuno terapéutico”. Con el
ayuno, podríamos mejorar muchas enfermedades, como la hipertensión,
enfermedades cardiovasculares, prevenir o mejorar la diabetes, las inflamaciones
intestinales, el asma o la artritis, entre otras muchas más.
Se trata de "enfermedades de la civilización", basadas en dietas altamente procesadas y
refinadas, bajas en fibra y demasiado rica en grasas saturadas y elevadas
cantidades de proteínas animales.
En los últimos años, algunos estudios han confirmado, el positivo efecto
que tienen en la salud, las dietas basadas en los “cereales integrales, legumbres, hidratos de carbono complejos (absorción
lenta), frutas, verduras, cantidades muy reducidas de grasas saturadas y
productos de origen animal.
Así mismo, en los últimos
años, me han impresionado sobremanera la evidencia recogida sobre “los efectos beneficiosos”
de la fibra, los productos de soja, el pescado graso (azul), la cebolla, el
ajo, el jengibre y el aceite de oliva extra virgen y sobre “los efectos perjudiciales” del exceso de azúcares
y cereales refinados, la cafeína, la leche y derivados, el alcohol, el tabaco, los
aditivos y conservantes alimentarios que se utilizan en los procesados
industriales.
El consumo regular de fibra de salvado de avena o de
trigo disminuye el nivel de
colesterol (malo) y puede que también aumente el colesterol (bueno)
En los “pescados grasos”, (sardina,
caballa, arengue, salmón, boquerón, etc), se encuentran los mejores ácidos
grasos omega-3.
Las “cebollas” poseen propiedades anti-cancerígenas, previene la
gripe, aumentan el colesterol (bueno) y disminuyen el riesgo de formación de
coágulos en sangre y, por añadidura, tienen una probada eficacia en la
prevención de alergias y ataques de asma.
El “ajo” es utilizado para combatir las infecciones, previenen la
gripe, reduce el nivel de colesterol, disminuye la hipertensión y potencia el funcionamiento inmunitario.
El “aceite de oliva extra virgen” es uno de los alimentos principales de la dieta
mediterránea. Contiene ácidos grasos mono-insaturados muy beneficiosos para la
salud. Se dice que el aceite de oliva sólo tiene efectos beneficiosos: reduce
el colesterol malo y tiende a aumentar el bueno. También tiene un efecto
protector específico contra el daño que el colesterol (malo) ejerce sobre las arterias.
El “azúcar (blanquilla) refinada”, aparte de
proporcionar calorías "vacías", no tiene ningún valor nutricional, reduce la
capacidad de producción de insulina del páncreas, puede agravar las condiciones inflamatorias, incluyendo la
artritis, la artrosis y la irritabilidad intestinal, entre muchas otras.
La “cafeína” es altamente adictiva,
produce dolor de cabeza, fatiga, depresión, dolores musculares, irritación del
estómago, hipertensión, ... etc.
La “leche”, al fermentar en el
estómago, produce acidez y mala digestión, debido a sus proteínas, puede
ocasionar reacciones alérgicas y asmáticas, incluyendo brotes artríticos y
congestiones nasales (sinusitis).
Los fabricantes emplean
aditivos alimentarios, conservantes y colorantes, la mayoría de ellos
sintéticos, para intensificar el sabor, prolongar la vida útil y alterar la
apariencia de los alimentos y no precisamente para mejorar su valor nutricional.
Por
regla general, se recomienda a las personas
que quieran tener una dieta más sana, que
coman frutas variadas y verduras crudas (ricas en fibra), además de salvado de
avena y pan integral (de espelta) por las mañanas. Se sugiere, que como
fuente principal de proteína, utilicen
los productos de soja, cereales integrales, legumbres, frutos secos crudos y
pescado azul. Las cebollas, los
ajos y el jengibre, encabezan la lista de recomendaciones, así como usar
el aceite de oliva para la
preparación de la comida cotidiana y en las ensaladas y “pan con aceite”, ha de
ser “aceite de oliva extra virgen".
No obstante,
hemos de tener muy en cuenta que cada persona tiene unas necesidades
nutricionales individuales porque cada persona es única.
Los “ayunos” a
base de un solo alimento (fruta y agua), son muy recomendables. Estos ayunos no han de exceder a dos o tres días seguidos y se recomienda el hacer un día
de ayuno a la semana.
Para trastornos
específicos y muy concretos: la Sandía para el mal funcionamiento de los
riñones y los cálculos biliares; las Cebollas hervidas para la bronquitis
crónica y el agua templada con Zumo de Limón y jarabe de Arce para purificar el
hígado. Durante este proceso de descanso fisiológico y desintoxicante, es
normal que se produzca alguna "crisis curativa".
Parece obvio, que con una alimentación saludable, uno
pueda sentir también, como si la mente como el cuerpo físico, se estuvieran
limpiando a sí mismos, se despierta la intuición sobre lo que debemos comer,
apreciamos mejor el sabor y necesitamos comer una cantidad menor, porque los
alimentos naturales y llenos de vitalidad, son mucho más nutritivos.
A partir de las
cualidades alimenticias, las Plantas Medicinales también tienen un papel
importante en la recuperación de la salud. Por ejemplo:
- El extracto de hojas de Ginkgo
biloba mejora la micro-circulación y la agilidad mental.
- El Hipérico posee propiedades
antidepresivas.
- La Raíz de
Ginseng disminuye el estrés y estimula el sistema inmunitario.
- La Echinácea es muy buena para prevenir los resfriados, catarros y la gripe. Tiene propiedades antivirales y estimula el
sistema inmunitario.
También juegan
un papel muy importante en la salud, tanto las diferentes vitaminas como los
distintos minerales que el cuerpo necesita para realizar la función metabólica
nutricional.
La administración
de un suplemento de Magnesio, por ejemplo, es una ayuda eficaz en el tratamiento
del asma, las enfermedades cardiovasculares, huesos y articulaciones.
La Levadura de cerveza” es buena para fortalecer el
sistema nervioso.
La Lecitina de soja es fantástica para regular el
colesterol y las grasas saturadas (Triglicéridos)
Otro tema muy importante es la relación existente entre los
"Radicales Libres" y los "Antioxidantes".
Los Radicales Libres: Los procesos
normales del organismo producen radicales libres como el metabolismo de los
alimentos, la respiración y el ejercicio. Estamos expuestos a elementos del
medio ambiente que crean radicales libres como el tabaco, la radiación, los medicamentos,
los aditivos químicos en los alimentos procesados y pesticidas, solo por nombrar los más comunes.
La producción de Radicales Libres
tambien se ven incrementados de modo significativo, por la contaminación
ambiental y una gran variedad de tipos de estrés físico, mental y emocional.
Los Antioxidantes: Son
sustancias que ayudan al cuerpo a protegerse del proceso de oxidación
descontrolada, que desencadenan los radicales libres." Se
podría comparar con el "mínio" que se pone en los metales para eliminar y
proteger la oxidación del metal."
Los Antioxidantes se encuentran
en el olivo, ajo, arroz integral, coliflor, brócoli, berenjena, jengibre, perejil, cebolla, cítricos (vitamina C), tomates, aceite de semilla de la vid,
té verde, romero, entre otras muchas sustancias.
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Saber combinar los distintos
nutrientes alimentarios es fundamental, sobre todo, para favorecer las
digestiones y facilitar el metabolismo de los alimentos.
a) Las proteínas animales y los hidratos de
carbono, no se aconsejan que se utilicen formando mezclas en una misma comida.
b) Las proteínas animales se
acompañarán con ensaladas variadas o
verduras.
c) Es aconsejable que la Comida del medio día,
esté predominada por Hidratos de carbono complejos y la Cena se componga de
ensaladas o verduras con cantidades pequeñas de proteína animal (pescado blanco
o azul)
“Todos nosotros hemos de ser Conscientes y Responsables
de nuestro estado de salud y, la alimentación es fundamental”.
Es preciso “Recordar”: “Somos lo que comemos”
“Que el Alimento sea tu
medicamento” y
“Aliméntate con aquello
que te cura”
Emilio Tolosa Valverde
Mail: emiliotolosa@me.com
Tno. de Contacto: 647 42
31 91
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