LOS ALIMENTOS "GERMINADOS"
“ALIMENTOS
LLENOS DE ENERGÍA Y VITALIDAD”
Se denomina germinado a cualquier semilla
cuyo metabolismo es estimulado por el contacto con el agua, el aire o el calor.
Germinar es crear las condiciones adecuadas e idóneas
para que la vida que habita en cada
semilla despierte y,
al añadir los germinados a nuestra
alimentación cotidiana, podamos conciliar mucho mejor el modo actual de vida,
con el mantenimiento de una buena Salud.
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Radio Sants-Monjuic (FM 102.5). Sección de "SALUD Y VIDA"
presentado por Emilio Tolosa
Programa en Audio MAS ALLA DE LA TIERRA,
Radio Sants-Monjuic (FM 102.5). Sección de "SALUD Y VIDA"
presentado por Emilio Tolosa
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"LOS GERMINADOS"
Los germinados son uno de los pocos alimentos que podemos
ingerir cuando aún están vivos, lo cual aumenta enormemente su valor nutricional.
Las semillas, los cereales, los frutos secos y las legumbres
germinadas, son brotes llenos de vitalidad. Su excepcional cantidad de
nutrientes los hace indispensables en una dieta sana y saludable y,
además de ser buenos están muy buenos.
El contenido
nutricional de los germinados es equiparable al de las frutas y verduras, pero
las superan en cuanto a su riqueza enzimática y en clorofila, muy importante por su acción anti-anémica, revitalizante y antitóxica.
Por todo ello los convierte en alimentos completos que pueden contribuir a
corregir las carencias de la alimentación moderna.
Los germinados no son sólo una adición nutritiva a tu
dieta, sino que son además, muy deliciosos.
Son una de las mayores fuentes concentradas de vitaminas,
minerales, enzimas, aminoácidos y proteínas, en todo el planeta Tierra. Además
de ser “Súper Nutritivos”, los
germinados son unos de los ingredientes más versátiles en nuestra cocina. Pueden
ser el principal ingrediente del plato que se cocina o se sirve como guarnición.
Además son un fantástico elemento en la mesa (ponlos en un bol y cómelos
directamente del bol a la boca).
Los germinados, como todas las verduras y vegetales, son
mucho más nutritivos en estado natural o crudos y, por el hecho de ser
alimentos vivos, son los vegetales que nos aportan mayor cantidad de
nutrientes.
Es muy importante comprender que cuando están crudos son
de mejor calidad.
Los germinados son únicos, ya que están disponibles en
cualquier época del año y en cualquier lugar del mundo. Su ciclo de cosecha es de tan solo una semana y su rendimiento es muy
grande. Con un solo kilo de semillas de alfalfa, por ejemplo, se
producen entre 10 y 14 kilos de germinados frescos.
Propiedades nutricionales:
Las propiedades nutricionales de los germinados son
altísimas.
Por ejemplo, en cuanto a proteínas se refiere, los germinados de
alfalfa, pipas de girasol y rabanitos, poseen un 4%, mucho más que muchas
verduras, y los germinados de soja o de guisantes, poseen un porcentaje del 27%
de proteínas, que son comparables al porcentaje de la carne, la leche o los
huevos, pero sin el gran contenido en grasas.
Los germinados de cereales y algunas semillas como el
trigo y las pipas de girasol, son ricos en grasas vegetales. El aceite de
girasol es la mejor fuente de ácidos grasos omega 6, y los germinados de pipas
de girasol hacen esas grasas más digestivas y asimilables.
Propiedades terapéuticas
Los germinados
son sobradamente conocidos porque ayudan a prevenir muchas enfermedades.
1.- Favorecen los
procesos de desintoxicación y depuración.
2.- Fortalecen el
sistema inmune.
3.- Combaten la
acción de los radicales libres.
4.- Estimulan la
secreción del páncreas.
5.- Facilitan la digestión al
activar los procesos de regeneración y
desinflamación del aparato
digestivo.
6.- Mejoran y
fortalecen el funcionamiento de la flora intestinal.
7.- Rebajan el
índice de colesterol.
¿Como obtener los germinados en casa?
Ingredientes:
- Un Frasco de vidrio de un litro con boca ancha.
- Tres Cucharadas
de semillas bien lavadas (lenteja, soya, trigo,
alfalfa, garbanzo, etc.)
- Medio litro de agua.
Procedimiento:
Las
semillas se lavan y se colocan en el frasco con agua (tres veces su volumen).
La boca del frasco puede cubrirse con una tela delgada para que no entre polvo
ni insectos.
El frasco se deja en un lugar obscuro y cálido: de 10 a 12 horas para la alfalfa, de 12 a 15
horas para las lentejas y soya. Luego se escurre el agua (la tela evitará que
salgan las semillas) y, seguidamente, se deben enjuagar muy bien con agua.
Se
acomodan los granos a lo largo de la pared del frasco y se vuelven a colocar en
un lugar oscuro y cálido, enjuagándolos, dos o tres veces los primeros días, y
luego una vez al día. Cuando los brotes tienen de 2 a 3 centímetros de largo se
exponen a la luz solar indirecta, por espacio de unas 2 horas para que las
hojitas se pongan de color verde, o sea, para que se les forme la clorofila,
con esto se favorece el aumento de Vitamina C y toman un sabor más agradable.
Si se desea separar las capas o pieles exteriores de las semillas, o sea,
las cáscaras antes de comer los brotes, éstos se colocan en una cubeta con agua
y entonces las cáscaras flotan y se recogen en la superficie, mientras que los
brotes se van al fondo.
¡
Ahora los germinados ya están listos!
El cuidado de los germinados
consiste básicamente en proporcionarles el drenaje adecuado (escurrir
completamente el agua con que se enjuaguen) para mantenerlos solamente húmedos,
ya que mucha agua o muy poco aire, crearán hongos y desechos. Cuando el clima
sea mas caluroso y más húmedo, se debe acortar el tiempo de remojo y se deben
enjuagar con más frecuencia para mantenerlos frescos. Así pues, el tiempo de
germinación varía según la temperatura y la clase de semilla tiene mucho que
ver con el tiempo de germinación.
Por ejemplo, los brotes de ajonjolí se amargan teniéndose en proceso de
germinación más de dos días, es decir que deben aprovecharse antes de las 48
horas después de haberse iniciado el remojo. En el caso del amaranto se
consideran como condiciones óptimas para la germinación, una temperatura de
30°C y un intervalo de tiempo entre 18 a 30 horas, ya que puede obtenerse un
incremento en la concentración de proteína de 15.78 a 16.11% y en cuanto a la
lisina de 4.52 a 5.55 gramos por 100 g. de proteína.
Los germinados en la alimentación.
En comparación con otros alimentos, los germinados son la máxima manifestación
de los alimentos vivos, gracias a su fuerza de crecimiento; precisamente
contienen hormonas de crecimiento, además de proteínas de gran valor biológico.
Sus efectos desintoxicantes y reconstituyentes, ayudan a que nuestro cuerpo se
mantenga sano. Son uno de los alimentos más ricos en enzimas, vitaminas,
minerales y oligoelementos, presentados además en una combinación fácilmente
asimilable.
Los germinados fortalecen el sistema inmunitario y constituyen un
excelente suplemento vitamínico para contrarrestar los efectos negativos de la
vida actual: estrés, ruido, exceso de trabajo y alimentos desnaturalizados.
Las semillas germinadas son un alimento pre-digerido, lo que supone una
economía energética para el cuerpo, al exigir menos esfuerzo al aparato
digestivo.
Por ser alimentos frescos, no se pierde la energía de sus sustancias activas
y debido al alto contenido en enzimas llegan a aprovecharse todas, a diferencia
de los alimentos desnaturalizados (energías vacías) o de las carnes (energía excesivamente ácida y costosa, entre
otros inconvenientes). Los procesos industriales destruyen la vitalidad del
alimento que requerirá más energía, para ser digerido y además, "robará" sustancias orgánicas del
propio cuerpo para poder asimilarlo.
Se trata pues, del alimento más
nutritivo y vital al mínimo precio. Es más barato que cualquier otro, si
calculamos la cantidad de energía y dinero gastado antes de que podamos comer
un determinado alimento. No necesita
productos químico, maquinaria, transporte, empaquetado, publicidad, personal,
intermediarios...etc.
Gracias a la Colaboración de todos, el Grupo de “SALUD Y VIDA” va expandiéndose, para hacer llegar a muchas mas personas, el Conocimiento de la Salud, tanto Física, como Mental y Emocional, porque, para vivir de forma Equilibrada, en Armonía y Plenitud, hemos de regular adecuadamente, el Cuerpo, la Mente, las Emociones y el Espíritu interno.
Blog de Emilio Tolosa Valverde
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